Los característicos miradores de madera ofrecen una imagen totalmente renovada.

Baskolan ha completado la restauración de la fachada del número 16 de la calle Sombrerería, en el Casco Viejo bilbaíno. Las obras comenzaron en octubre de 2011 y han alcanzado un importe de 59.351 €.

Las fachadas de este edificio, ubicado en la esquina entre las calles Sombrerería y La Cruz, se mostraban envejecidas por el efecto del tiempo y los agentes externos. El revoco original presentaba desprendimientos, fisuras y otras patologías secundarias que han sido reparadas en profundidad, igualando finalmente la superficie a base de morteros especiales y terminando el trabajo con la aplicación de pintura en dos colores.

El edificio cuenta en su primer nivel, ocupado hoy en día por locales comerciales, con un revestimiento de piedra natural que ha sido sometido a una exhaustiva limpieza a base de chorreo a presión de polvo de vidrio húmedo. En cuanto a la fachada de la calle La Cruz, el balcón de sillería existente en la planta primera ha sido reconstruido para recuperar los volúmenes originales.

En cubierta, los trabajos se han centrado en la recomposición de los frentes de alero de madera, gravemente afectados por la incidencia del agua.

Actuaciones en los miradores

Un rasgo característico de la fachada del edificio son sus miradores de madera, que han sido sometidos durante la obra a un proceso de lijado, limpieza y pintado. La misma actuación se ha llevado a cabo en las contraventanas de madera y las barandillas de forja de las balconadas, en cuyo suelo se ha restituido la chapa de zinc.

En la foto, imagen de la fachada del edifico de Sombrerería 16 antes (izquierda), y después (derecha) de las actuaciones de restauración.